En el oeste de Australia, grandes monstruos sobre ruedas se encargan de trasladar el mineral de hierro extraído de la región Pilbara. Pero lo que diferencia a esta mina de muchas otras no son estos enormes vehículos, sino quien los conduce. Estos camiones no tienen conductor y son controlados a 1 200 kilómetros de distancia.
Estos camiones sin conductor forman parte de una iniciativa llamada “Mina del futuro” de Río Tinto. Este ambicioso proyecto planea que para el 2016, no solo esta clase de vehículos sean operados a distancia, sino que también busca que los trenes prescindan de un conductor humano en la cabina.
La implementación de este sistema consiste en digitalizar la cartografía de la zona e introducir datos en el sistema encargado de calcular las rutas y cadencias de los camiones. Uno de los beneficios de este sistema es sin duda, el ahorro de combustible y el mejor control sobre la producción minera.
Fuente: The Telegraph
