Audi sorprende con el R8 V10 RWD, un vehículo único que abandona la tracción integral y vuelve a la tracción trasera con modo Sport y derrapes controlados.
La tendencia de los deportivos y sobre todo de Audi es ofrecer autos con tracción integral o tracción Quattro como ellos la han bautizado. Pero a veces hay excepciones, y este R8 V10 RWDes esa regla que promete ser todo un éxito. Audi nos lo trae en dos modelos, un Coupé con todas sus letras y la versión Spyder muy estilizada.
La potencia de esta tracción trasera llega a los 540 CV desde el motor V10 de 5.2 con cambio automático S tronic de 7 velocidades. Con estas prestaciones, este R8 llega de 0 a 100 km/h en 3,7 segundos en la versión coupé y 3,8 segundos en el Spyder. En términos de velocidad máxima la Coupé llega 320 km/h y su semejante Spyder a 318 km/h.
Pero un detalle que nos fascinará es que tiene un modo de derrape controlado en el modo Sport y el hecho que no tenga tracción integral hace que cargue con 65 kg menos que su primo con tracción Quattro, al no disponer de elementos que le aportan peso como el embrague multidisco, diferencial delantero o eje de transmisión. Llega a los 1 596 kg en Coupé y 1 695 el Spyder.
Este modelo incluye una estética agresiva típica de esta línea de Audi, pero se diferencia de las demás versiones por sus sideblades con color negro brillante en la parte superior, y mantiene el mismo color de la carrocería en la parte inferior. Además, también son de negro brillante el blade frontal, los estribos laterales y el difusor.
Llegará pronto, a inicios del 2020. Los precios en Alemania son 144 mil euros y 147 mil euros en su versión Coupé y Spyder, respectivamente.
