Para muchas personas, lo primordial para la conservación de los neumáticos es estar pendiente de la presión, sobre todo en las épocas de altas temperaturas, puesto que, el calor hace que la presión de las llantas aumente.
Lo ideal para medir la presión de las llantas, es hacerlo cuando el neumático está en frío (tal como cuando vamos a trabajar con el motor). Según el ingeniero Piero Vicente, el cuidado de los neumáticos se ve afectado por muchos factores, el tipo de conducción, el terreno donde acostumbramos a transitar, los golpes que reciben las llantas.
Debemos evitar golpear las llantas contra el sardinel, dar rebotes muy agresivos con los rompemuelles, buscar un buen limpiador, de esos que le dan brillo, sin embargo, debemos utilizar uno que proteja el caucho y lo nutra.
La rotación, según Marco López, es más que importante en este aspecto, debe realizarse cada dos cambios de aceite.