Cada mercado es particular, en Perú existen terrenos muy diferenciados por su estilo de vida y forma de consumo. En los autos sucede los mismo.
Las aseguradoras vehiculares, también sufren complicaciones al momento de brindar las soluciones más adecuadas para cada siniestro.
El tráfico en la capital, los escasos espacios para estacionarse en horas de mayor tránsito y la inseguridad ciudadana, serían las principales causas de accidentes en la ciudad. El temor de recorrer las principales avenidas, no solo se encuentra en los conductores o pasajeros, también afecta a los peatones, en su andar cotidiano, como es visto a diario en las noticias.
En nuestro país, solo contamos con 6 compañías de seguros vehiculares, y no todos los servicios son diferenciados para cada tipo de cliente. La principal variante es la económica, es decir, el dinero que cada persona tiene disponible para la compra de una póliza.
Para el gerente de negocios de la aseguradora vehicular Quálitas, José Salmón, el servicio debe ser personalizado, teniendo en cuenta las necesidades particulares de cada cliente. Es fundamental identificar el costo de cada vehículo y la inversión monetaria del asegurado.
Por ello, la gestión debe ser 360, con total claridad para el cliente, sin dudas existentes de los ítems que cubre un determinado seguro, según el costo del mismo.
