Carlos Sainz hace debutar el Volkswagen Polo WRC en San Marino

Volkswagen Polo WRCEl español Carlos Sainz fue el encargado de hacer debutar el nuevo Volkswagen Polo WRC, que el próximo año desembarca en el mundial de rallys, en una prueba, el Rally Leyend de San Marino, una cita de vehículos históricos que se celebra en la república transalpina entre el viernes y el domingo.

El bicampeón del mundo de rallys disputa esta carrera espectáculo acompañado por Luis Moya, el copiloto con el que consiguió sus mayores éxitos deportivos, y están actuando de número cero, por lo que sus tiempos no computan para la general.

Volkswagen desembarca el próximo año en el mundial de rallys y ha destinado este año al desarrollo del vehículo de la mano de Carlos Sainz. De las evoluciones que se han realizado del vehículo, un total de tres, esta es la primera, por lo que el comportamiento dista mucho del que tendrá el vehículo que debute en Montecarlo, primera cita del 2013.

Pero desde la marca quisieron hacer debutar el vehículo en esta carrera que levanta una alta espectación entre los aficionados a los rallys.

La prueba está dividida en varias categorías y se desarrolla por algunos de los antiguos tramos de la cita que durante varios años perteneció al calendario del Mundial de rallys.

El vehículo más nuevo presente aquí data del 2002, y la mayoría pertenecen a las décadas de los 70, 80 y 90. En el cartel, además de algunos de los coches más espectaculares de la historia de esta disciplina, están también algunos de los pilotos que mejores resultados han conseguido.

Así, en la cita sanmarinense se encuentra el finlandés Juha Kankkunen, cuatro veces campeón; el sueco Bjorn Waldegard, una vez campeón; el belga Jacky Ickx, el único piloto que ha ganado el mundial de Fórmula Uno y el de motociclismo; o el uruguayo Gustavo Trelles, cuatro veces campeón del Grupo N.

En total son tres días de competición, que está compuesto por una especial hoy ya disputada, seis tramos mañana sábado, y cuatro especiales más el domingo.

Los tramos son cortos, ninguno llega a los doce kilómetros y el objetivo es dar espectáculo y ver en movimiento algunas de las máquinas y los pilotos que marcaron la historia de este deporte.

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