El Aston Martin Virage hizo su debut en el Salón del Automóvil de Birmingham en 1988. Fue diseñado por John Heffernan y Ken Greeley, y elogiado por su estilo fresco y contemporáneo.
Su nuevo motor V8 era uno de 5,3 litros, con cuatro válvulas por cilindro, que daba una mejor respiración y superación de las pérdidas de energía, gracias al uso de convertidores catalíticos.
Este auto, que pesaba 1790 kilogramos, podía llegar a una velocidad máxima de 254 Km/h y acelerar de 0 a 60 Km/h en solamente 6,5 segundos.
Años más tarde, en marzo de 1992, una versión de 6,3 litros del Virage se reveló con un mejor frenado y manejo. Los cambios corporales fueron mínimos, como los renovados arcos de rueda ensanchados, spoiler delantero revisado, y un alerón trasero opcional.