Las buenas historias de suspenso gustan a casi todos y sin duda, la leyenda del Ford Mustang GT 500 de 1967 de Jim Morrison, vocalista del grupo The Doors, es un relato digno de escuchar.
Todo empieza cuando esta leyenda de la música recibió como obsequio este Mustang por el éxito de su primer disco. Ese modelo ya era considerado como uno de los más valorados en la familia Mustang y que perteneciera a Morrison de seguro lo convirtió en uno de los más codiciados.
Apodado “The Blue Lady”, la vida de este auto en manos del cantante no pudo ser peor. Conoció lo peor del cantante y recibió toda serie de golpes y maltratos a causa del alcohol y las drogas.
Sin embargo, dos años antes de que el cantante muriera, el auto simplemente desapareció. Sus características eran únicas: Un motor V8 428 Police Interceptor de 355 caballos de fuerza, acompañado de una extraña caja manual de 4 velocidades. Hasta hoy, muchos aficionados aseguran haberlo visto en las calles, pero ninguna prueba puede confirmar la veracidad de estos avistamientos.
Sin duda, la historia del paradero del Mustang de Jim Morrison seguirá desconcertando a los aficionados, quienes aún esperan encontrarlo en alguna subasta.
Fuente: Motor y Racing